1 de agosto de 2014

Entendí que la vida no se trata de sonreír y actuar bien con todo lo que te rodea, con todo lo que encontras frente a tus ojos, entendí hace algún tiempo, que se pierde más veces de las que se ganan y que cuando cuentas personas sinceras que están a tu lado no pueden ser mas de los 10 dedos de tus manos. Entendí que no se puede ser fiel a todo el mundo, siempre va a existir alguien que te desvie o haga cambiar tu parecer. Aprendí a conocer y dejar que me conozcan aunque sean tan diferentes a mí. Aprendí que de todo lo que se vive algo de enseñanza siempre queda. Aprendí que llorando, las penas se van, se alivia el corazón, que con una parte de un rayo de sol, los ojos brillan más intensos. Qué sería más importante es este momento que poder contar con ese alguien que a pesar de mis idas y vueltas, mil y una veces, intento escaparme, podría contar con tu presencia. Ya aprendí a ver todo de otra forma, ya no es como antes, es distinto, vamos estirándonos y abriendo nuestras mentes, ahora puedes entrar dentro de mi camino.-