23 de mayo de 2014

Ninguno de los dos había dicho nada. No es necesario hablar del amor, porque el amor tiene su propia voz, y habla por si misma. Aquella noche, en la orilla de la fuente, el silencio permitió que nuestros corazones se acercasen y se conociesen mejor. Así, mi corazón oyó lo que decía su corazón, y se sintió feliz{...} El amor es siempre nuevo. No importa que amemos una, dos, diez veces en la vida: siempre estamos ante una situación que no conocemos. El amor puede llevarnos al infierno o al paraíso, pero siempre nos lleva a algún sitio. Es necesario aceptarlo, pues es el alimento de nuestra existencia. Si nos negamos, moriremos de hambre viendo las ramas del árbol de la vida cargadas sin coraje para estirar la mano y agarrar los frutos. Es necesario buscar el amor donde este, aunque eso signifique horas, días, semanas de decepción y tristeza. Porque en el momento en que salimos en busca del amor, el amor también sale a nuestro encuentro. Y nos salva.